Fui a una pileta (maldigo la hora) una radio a todo grito desgranaba canciones de un poeta, el poeta decía:
Para acudir a la fortuna
te venden dioses novedosos
para encontrarse la ternura
hay quien se manda una pastilla
y este septiembre tan enero
y esta sonrisa tan llorona.
El agua fresca y el aire caliente y la radio insistía con el mismo poeta, alcancé a escuchar
Quiero ser divertido y delicado
Para que me sonrías cuando nos miramos
Pero soy orgulloso y distraído
Y si es que te ignorado perdón te pido
Es que para actuar yo nunca he servido
Prefiero estar solo que ser un mal partido
Traté de quedarme debajo del agua pero no aguanté ni medio minuto, al emerger escuché
Señora de las cuatro décadas
Usted no necesita enseñar
Su figura detrás de un escote
Su talento esta en manejar
Con mas cuidado el arte de amar.
Decidi quedarme solo quince minutos mas
Fui a casa (bendigo el momento) elegí a todo suspiro canciones de otro poeta, el poeta decía
La página de sucesos
del Mercurio y La Estafeta,
entre dietas para obesos,
chismes y falsos profetas,
confirmaba que sin besos
se marchitan las violetas.
Ya no volví a la pileta
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