Lo único bueno que tiene este sistema de vida, es que vivimos hacia el futuro, así es que salvo algunos videntes y mentalistas, no sabemos qué va a ocurrir y a veces también nos pasa que no sabemos lo que pasó y entonces empezamos a preguntarnos y a preguntar a los otros, que fue de nuestra juventud?, porqué no fuimos felices?, a qué edad dejamos de creer? Filósofos y estadistas de diversa laya, hacen un culto de responder esas preguntas. Ríos de tinta y miopías incipientes gastan el papel y los ojos de las gentes, leyendo las conclusiones, para volver a empezar y al cabo del tiempo, repetir las mismas preguntas y darse cuenta, recién entonces, que no tienen respuesta. Y qué tiene de curioso? No puede haber respuestas, nadie se pregunta porqué el león se come la gacela? en la familia de la gacela lo dan por descontado. Claro, es un paso en la cadena alimentaria y ese honor le cupo a un congénere y la fatalidad del mundo del cual nadie puede escapar.
Sólo algunos que creen tener éxito por un rato están convencidos de poder responder aquellas preguntas. Pero basta que un tren vengador los arrolle en el paso a nivel de Estilo y Mendacidad para que él, si sobrevive o la familia, comiencen desesperadamente el ciclo de preguntas sin respuestas. Por qué sucedió esto? Porqué a mí? Que fue de mi vida? Eso. Fue el pasado imperfecto
Comienza, sigue? Una semana calcada, sólo unos segundos más de tiempo y un mechón menos de cabellos.
Dice la radio en la voz monocorde del locutor de turno, que la clave es ésta semana. A lo sumo, la que viene. La gente no podrá soportar el peso de las tarifas, la deuda, los intereses tan altos, bla..bla…Quién entiende eso?, en qué idioma habla este lenguaraz? Por qué es que no le entiendo?
Voy a X, al menos ahí hay aire puro, morir en ese lugar, casi es una bendición y a cuenta de ese momento voy pagando unas cuotas de ansiedad, miedo y deseos improcedentes. Al llegar el clima ha cambiado, casi no hay viento, las nubes casi tocan el suelo, el aire cargado de humedad. Va a llover. En un rato nomás, las luces del pueblo se encienden, la lluvia lava toda la suciedad del mundo, ríos de fango corren hacia las cunetas, las chapas en los techos, cuentan sus desvelos en un ritmo perfecto. Dentro del almacén de ramos generales, escucho contar hasta el hartazgo, las historias de años llovedores y sequías inoportunas
No comments:
Post a Comment